miércoles, 2 de marzo de 2016

¿Porqué apenas escribo?

Si bien es cierto que en muchas ocasiones he necesitado evadirme, o más bien huir. Llevo un tiempo que no escribo en mi blog de forma asidua porque no me apetece dar una apariencia de pena máxima. Y sé que en estos momentos es así, por los emails, whatsapp y comentarios que recibo.

Mi blog es sobre infertilidad, sobre el camino hacia la maternidad de una desgraciada infértil. Y como todos sabéis, no está siendo fácil, ni bonito, ni divertido, ni siquiera entretenido.

Las últimas transferencias ni las he contado, ni mis sentimientos, ni la nueva medicación que me mandaban, ni cómo lo pasaba en la betaespera.

Y es que escribir un blog sobre un tema concreto puede volverse contra ti, como creo que me ha pasado.

Yo no soy sólo infértil, no ando penando por las esquinas, no me  paso el día llorando hecha un bicho bola sintiéndome la más desgraciada.

Que en el campo de la fertilidad yo soy la más burra, sí. Pero en lo demás tengo sobresalientes.

Y sobre todo últimamente que parece que viva una nueva juventud. No tengo miedo a quedar con amigos, a pertenecer a grupos de whatsapp. Salgo más que cuando tenía 20 años. Me río a carcajadas. Soy feliz. Con esa espinita de la maternidad, pero soy feliz.

Me he descubierto pensando que me encuentro en muy buen momento. Hemos hablado mi marido y yo sobre una vida sin hijos, sin hacer dramas por ello. Ahora mismo no me apetece preocuparme demasiado. Parece que estoy de vacaciones infértiles, despues de este año pasado a piñón de tratamiento en tratamiento.

Por eso no escribo, porque sólo podría hablaros de infertildad, y esa faceta de mi vida es una M como una casa de grande. Y no me apetece dar una imagen de lo que no soy y de lo que no siento ahora.

Hace tiempo que no leo a la infertilpandy, que no leo blogs infertiles ni de maternidad (a verdeliss por supuesto que la veo, verdeliss forever), incluso instagram lo tengo abandonado.

He salido a la calle sin un movil que me ate a las redes sociales infértiles y he descubierto un nuevo mundo. Vale, estoy
exagerando un poco. Pero no se bien como explicaros exactamente en qué momento me encuentro.

Sólo me gustaría que os quedaríais con este apunte. Se puede vivir siendo infértil, se puede sacar la cabeza de la desgracia que vivimos y asomarse al mundo. A mí me ha costado años y fracasos hacer el esfuerzo de salir de mi cueva. Siempre decía que cuando me quedara embarazada volvería a mi vida anterior. Pero no he querido esperar más, no sé si me quedaré embarazada, no quiero seguir en esta cueva oscura y solitaria, no quiero sentirme la mas frustrada, no quiero estar metida en un bucle de infertilidad a mi alrededor.  Soy una persona de 30 pocos que lo que más le gusta en el mundo, lo que más de más sobre todas las cosas, es reírme.

Y allí me voy, a reirme mientras pueda. No se si volveré. Espero que sí.

Os quiero a todas. Siempre habéis estado conmigo. Gracias por tanto.

domingo, 7 de febrero de 2016

Cogiendo aire

Estoy en un momento de entre tanto, eso que tanto me gusta, donde estoy segura y tranquila. Estoy retomando una vida que aparqué hace casi 4 años. Con una carga pesada a la espalda y con momentos aun que me hacen llorar y flaquear, pero cada dia que pasa siento que vivo, ya no solo sobrevivo.

Cuando en la SS me dijeron que empezaria a final de marzo senti un alivio inmenso. Me parecio que tenia mucho tiempo por delante para despejarme. Pero el tiempo vuela. Hoy he sido consciente de que ya estamos en febrero. En breve estare de nuevi inmersa en todo el calvario de un nuevo tratamiento.

Kilometros de ida y vuelta a la clinica para llevar el tratamiento de forma pararela. Viajes a la SS para controles. Y asi una y otra vez, en un circulo vicioso y pesado.

Inspiro. Cojo aire fuerte. Espiro. Voy a poder con esto.

Lo que me espera es duro, o asi lo veo, quizas luego no sea para tanto, no se. Pero el tratamiento suena a pesadilla. No en sí lo que supone una estimulacion, puncion y demas, que tambien. Sino la de viajes que me esperan, la de agujas, legrados uterinos, autotransfusiones de plaquetas, ecografias, sedaciones y demás. Cosas nuevas que me asustan, cosas que ya conozco y me asustan mas. Demasiado pesado, demasiado lo pasado.

Inspiro profundamente. Espiro pausadamente. No será para tanto. Podré con ello.

Y a mi cabeza vienen los negativos, el bioquimico, las ilusiones rotas, el corazon destrozado, la positividad enterrada, la alegria que se esfumó, la fuerza que ya flaquea, las ganas que se van...pero algo, hay algo, algo que no se ni que nombre tiene, algo que me hace continuar. Voy a continuar.

P.D. siento las ausencias, los comentarios que no contesto, lo dejado que tengo mi blog y los ajenos. Pero simplemente no puedo.

jueves, 7 de enero de 2016

La beta ha bajado

Solo 3 unidades, como si mi cuerpo se resistiera a dejarlo marchar. Ojala las noticias hubieran sido otras.

Se acabo este minisueño y me quedo rota la primera semana del nuevo año. Hoy no veo el lado bueno por ningun sitio.

Gracias por vuestros buenos deseos.

lunes, 4 de enero de 2016

Como empieza mi año

Lo primero pedir  disculpas por haber abandonado el blog y por no contestaros a muchas cuando me habeis felicitado las fiestas. Pero unas fiestas en betaespera son un sinvivir.

Me hice mi cuarta transferencia el dia 23 de diciembre. Los dos ultimos embriones que me quedaban, los mas flojillos de calidad. Pero esta vez llevabamos un arsenal completo de medicacion, hasta cosas ilegales te he recetado, me decia mi gine.

He tenido una betaespera desquiciante. Y hoy, con resultado en mano, toca seguir desquiciandome unos dias mas.

Mi beta ha dado positiva, pero un valor muy bajito, y el sabor es tan agridulce que ni siquiera puedo pensar con claridad. Pienso que tengo (o tuve) un monstruito alojado en mi cuerpo y eso me llena de felicidad. Me da tranquilidad pensar que mi cuerpo sabe implantar un embrion. Hoy me he sentido mujer despues de 4 años.

Ahora sólo queda esperar, en tres dias repito analisis y que sea lo que tenga que ser. A pesar de todo siento paz, no estoy nerviosa ni ansiosa, creo que hoy, al saber que estoy embarazada, aunque finalmente no vaya bien, he hecho las paces con mi cuerpo.

No estoy feliz, ni tampoco triste. Creo que solo estoy asustada y esperanzada. Si no es para esta vez, para una proxima.

Esto ha sido un chute de energia para mi cuerpo y mi mente ya cansados de una lucha sin frutos. Aunque esto sea un "si, pero..." a mi me parece un avance muy grande.

Y asi entro en el 2016, con la fe recuperada, y con mas ganas que nunca de seguir luchando. Y agarrandome a esa pequeña posibilidad de que el embarazo prospere.

Bienvenido 2016