Solo
estas creciendo.
Estas
son las palabras que me ha dedicado una amiga tras hablar con ella en relación
a la infertilidad, a las terapias naturales, al misticismo, a querer llegar a
más, al aprendizaje interior…y me ha hecho pensar.
Y sí,
es cierto a la par que duro y difícil, que durante este camino una va
creciendo, y no me refiero a envejecer, si no al crecimiento personal.
Si me
pregunto si lo que sé a día de hoy, lo que he descubierto en estos años de
infertilidad, lo que he aprendido de mí misma, interiormente, lo que aprendido
de mi pareja, de él y de su relación conmigo, lo que he aprendido de la gente
que me rodea ¿me ha merecido la pena?
Sí, obvio
no quisiera ser infértil, no quisiera tener que pasar por lo que estoy pasando,
pero sinceramente, se me está abriendo un mundo de conocimiento interior que
hasta ahora desconocía, que me asombra, que me causa curiosidad, que me hace
querer llegar a más y más lejos, que me causa paz, que me hace sentirme mejor
conmigo misma y con los demás, menos prejuiciosa, más flexible, menos
cuadriculada, más empática.
Cuando
la vida te pone contra las cuerdas, te esta a su vez brindando una oportunidad
de experimentar una fuerza que no sabías que tenías, de crecer de una forma que
cuando miras atrás te sorprende gratamente, llegas a sentir que antes no sabías
nada de la vida, ni de ti misma, ahora es cuando notas un cambio…a mejor.
Me
encanta la gente que he ido recogiendo en este camino, no sé si seguirán
conmigo, ya muchas se han quedado atrás, pero todas, todas, me han aportado
mucho en el momento que lo necesitaba, creciendo juntas.
Y me
siento ahora en mitad de un camino, con mucho recorrido, y con mucho por
recorrer, atreviéndome por momentos, y con la boquita chica aun, porque la meta
de ser madre aun no la he traspasado, pero aun así, hoy, y desde esta
perspectiva, quiero agradecer que la infertilidad me tocara a mí.
Nunca
seré la misma, pero no puedo verlo como algo negativo ni mucho menos. Sí que mi
vida y mi día a día siguen limitados por la infertilidad, que una sigue
haciendo la táctica del avestruz y no se abre al mundo de forma completa en una
estrategia de autoprotección, pero me estoy convirtiendo en una YO mejor. Creciendo. Creciendo.